Estoy indignada. Hoy al despertar, tomé la revista "para la mujer" que sale los martes en el mercurio, la revista "ya". Llego a la columna de Consuelo Aldunate: treinta y uno, y esto es lo que me encuentro:
"Estamos en el mail del Bueno. Todo partió inocentemente, como siempre. Cuando vi que la Camila hablaba en serio con esto de dárselas de hacker, dije OK, hago el loco, lo más probable es que ni sepa cuál es su clave. No sé si para bien o para mal, pero pudimos meternos fácilmente a la cuenta del Bueno. Su contraseña: el nombre del equipo de fútbol en el que juega en una liga. ¡Mínimo que suba el nivel de seguridad!"
No me cabe en la cabeza cómo puede existir una mujer tan indigna de meterse al correo de su novio, publicarlo en su columna semanal como si no fuera grave invadir así la privacidad de una persona y más encima lavarse las manos diciendo que el nivel de seguridad de la contraseña del aludido es baja. Siempre me pareció un poco indigna esta mujer... pero esta vez llegó a un nivel intolerable. ¿Y la editora dónde quedó?
Y además tiene el descaro de cerrar la columna con un un párrafo que dice "¡Ay, lo amo!"
Espero que la próxima vez que escuche un "te amo" no corresponda a la misma noción del amor que tiene esta mujer enferma. Porque al menos para mí, no hay nada menos parecido al amor que esto.
En caso de curiosidad, la columna está completa en
http://blogs.elmercurio.com/ya/2009/07/28/las-pataletas-de-pablo.asp
No sé cómo ha durado tanto tiempo en la revista esta mujer con sus columnas vacías e histéricas. La editora debe ser igual de enferma para permitir que se publique algo así.
Mejor pensemos bien de ella, pensemos que permite que se publique tamaña basura solo para que todas las mujeres que lleguen a leerla se sientan equilibradas, maduras e inteligentes.. jajaja... es que en comparación... cualquiera.
¿Por qué será que las revistas para mujeres son así? A mí me encanta tomar revistas para mujeres, leer los test estúpidos y predecibles, ver las tendencias de la moda en europa para pensar que yo jamás usaría algo así en la calle, y que me recuerden que las famosas también tienen celulitis. Pero ese es el mayor grado de superficialidad que tolero, porque lo veo como una forma de pensar en algo que no sirva para nada, desconectar un rato las neuronas. Y, sí, me interesa sentirme bonita y quiero saber sobre cosméticos y cremas. Sin embargo, es lo que menos espacio y ponderación tiene en mi cabeza, y por algún motivo, esta gente cree que es lo único que nos importa a las mujeres. ¿De verdad nos vemos tan estúpidas?
Me encantaría que existieran publicaciones que valiera la pena leer, estoy aburrida de leer, escuchar y ver basura.
¿Será demasiado difícil publicar algo interesante sin hacerlo aburrido?
Tampoco diré que me esfuerzo en buscar revistas buenas. No, con suerte alcanzo a leer todo lo que debo leer para la universidad y de vez en cuando tomo alguna revista de las que vienen en el diario para despejarme un rato... y ahí encuentro estas barbaridades.
Dejen ya de publicar tanta mierda... por favor!
El tren de la vida
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