jueves, 3 de junio de 2010

un día que empieza como la...

Cuando una noche te vas a acostar y piensas "qué día de mierda me espera mañana", puedes tener por seguro que efectivamente será un día de mierda. O a lo menos, empezará muy mal.

Al menos en mi caso, pasa así:
Despierto media hora tarde, para empezar. Luego, al salir de la casa, pienso que tal vez milagrosamente puedo llegar rápido si es que el conductor del colectivo se apura y si el tren del metro llega a la estación al mismo tiempo que yo.

Salgo corriendo, tomo el colectivo, y el conductor decide que lo mejor es darse la vuelta por el camino largo que toma 5 minutos extra.
Entro al andén del metro en el momento en que el tren está a punto de cerrar las puertas y al mismo tiempo suena mi celular... nadie me llama tan temprano si no es por algo urgente, así que me preocupo y lo busco. Por supuesto, esa decisión provoca que no alcance a llegar al tren. Fin, lo perdí.
Reviso quien era la persona que me llamaba... y claro! no era una persona... era la compañía de teléfonos... me imagino, porque era un número de 5 dígitos.

Por mi cabeza vuelan una lluvia de groserías que quisera gritar al aire... y me calmo. Ya sé que no lo logré.

Porque la ley del metro es que si sales con el tiempo justo, en la mitad del túnel el tren se detiene sorpresivamente y no avanza en un rato, o bien, en cada estación escuchas la frase de la muerte: "señores pasajeros, el tren se detendrá en la estación por más del tiempo normal debido a la regulación de trenes"

Y efectivamente, eso ocurrió.

Eso sería todo. Tengo un 1 en el control de hoy.

miércoles, 2 de junio de 2010

Tercera semana de reiki...

...y hoy no lloro, no tengo pena, no me pican los ojos...

:)

bakán!