Desahogo de medianoche...

Lo malo de pasar unas fiestas tan maravillosas, es que cuando se acaba todo y volvemos a la rutina de siempre, es re fácil pegarse un porrazo.
No sé muy bien qué será, pero una mínima palabra de parte de quien te importa, puede hacer una diferencia tan grande... es lo malo de darle tanto poder a quien quieres.

¿Cómo querer a alguien sin darle el poder de dañarte?

Es tan extraño. A veces me siento muy sola, muy sola. Y no hay nada más alejado de la realidad. Tengo a tanta gente amorosa al rededor, gente que me da fuerza y alegría. Son hartos... y sin embargo, basta que uno de ellos tenga un mal día para que el mío también se vuelva malo.
Es difícil esto de autocrearse. Es hermoso, sí, pero es bien difícil.

Vaya a saber uno, tal vez es solo un día de sensibilidad desbocada solo por el hecho de ser mujer.
Me asusta un poco ser tan frágil.

Hoy siento que estoy avanzando un una venda en los ojos, lo que no es del todo malo, porque avanzo a fin de cuentas, pero me gustaría tener un poco más de claridad.

No creo que sea malo tener miedo. Me obliga a ser más valiente y enfrentar las cosas con más pasión. El miedo solo se volverá malo cuando no me deje seguir avanzando.